Últimamente en internet circula una frase que dice: no digas siempre nosotros, tú eres tú, yo soy yo, sin intereses comunes, no hay enemigos comunes. Cualquier cosa que aún no me haya hecho daño, no es mi enemigo. Si insistes en crearme un enemigo, entonces tú eres mi enemigo. Pero en la realidad, muchas personas no comparten intereses comunes con otros, pero creen que tú y yo tenemos un enemigo en común. Las calamidades de la humanidad durante miles de años se deben a que no han sabido definir claramente a quién pertenecen sus intereses, ni quién comparte intereses con ellos. Una de las metas de toda educación es ayudar a las personas a entender exactamente dónde están sus intereses. Creo que tener valores compartidos debería permitir tener intereses comunes.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Últimamente en internet circula una frase que dice: no digas siempre nosotros, tú eres tú, yo soy yo, sin intereses comunes, no hay enemigos comunes. Cualquier cosa que aún no me haya hecho daño, no es mi enemigo. Si insistes en crearme un enemigo, entonces tú eres mi enemigo. Pero en la realidad, muchas personas no comparten intereses comunes con otros, pero creen que tú y yo tenemos un enemigo en común. Las calamidades de la humanidad durante miles de años se deben a que no han sabido definir claramente a quién pertenecen sus intereses, ni quién comparte intereses con ellos. Una de las metas de toda educación es ayudar a las personas a entender exactamente dónde están sus intereses. Creo que tener valores compartidos debería permitir tener intereses comunes.