La trineo de Papá Noel parece haberse equivocado de regalos este año. El mercado de criptomonedas no ha llegado con la esperada tendencia alcista navideña, sino que ha experimentado el momento más frío del año.

Mientras los mercados financieros de Europa y EE. UU. se toman un descanso por las vacaciones, las corrientes subterráneas del mundo cripto no se han detenido. Esta mañana, Bitcoin volvió a caer por debajo de los 87,000 dólares, Ethereum apenas se mantiene cerca de los 2,900 dólares, y la debilidad del mercado se hace evidente. A diferencia de años anteriores, cuando circulaba la idea de un "rebote navideño" de Papá Noel, el ambiente en el mercado de criptomonedas en diciembre de este año es especialmente opresivo.

**¿A dónde ha ido la liquidez?**

Durante las vacaciones de Navidad, las principales plataformas de intercambio en Europa y EE. UU. cierran, y el pool de fondos global se reduce instantáneamente. Esto no es solo un problema de tiempo: la profundidad del mercado en su conjunto está desapareciendo. La noche de Navidad, en una plataforma principal, el par BTC experimentó una caída relámpago hasta los 24,000 dólares, en una tendencia extraña; una simple orden de venta pudo causar una gran ola de pánico.

Los datos lo confirman aún más: el ETF de Bitcoin en efectivo registró una salida neta de 175 millones de dólares en un solo día, el 24 de diciembre. ¿Qué significa esto? Incluso los inversores institucionales están evitando el mercado durante las vacaciones, y el soporte de compra en el mercado es severamente insuficiente.

**El panorama macro también está cambiando**

Lo que complica aún más la situación es la postura de la Reserva Federal: la declaración de que "no es necesario ajustar las tasas antes de la primavera" ha disipado por completo las expectativas de una bajada de tipos. La señal de política agresiva del sector financiero tradicional, combinada con la escasez de liquidez en el mercado cripto, crea una doble presión.

Esta temporada navideña, no solo se pone a prueba hasta dónde puede caer el precio, sino también la verdadera solidez de los activos en condiciones extremas.