Hace un tiempo, Eric Trump soltó una declaración contundente en público: que el Bitcoin este año podría llegar a 175.000 dólares. En cuanto lo dijo, todo el sector se revolucionó.

Su lógica es bastante directa: con la inflación disparada y los bancos centrales de todo el mundo imprimiendo dinero sin parar, el Bitcoin se convierte en el activo refugio más sólido. Y lo más importante, la administración de su padre dejó clara su intención de dar luz verde a las criptomonedas, y este apoyo político ha dado un buen empujón de confianza al mercado.

Pero, ¿es esto realmente un consenso en el sector? Para nada. El fundador de Cardano es aún más atrevido, diciendo abiertamente que los 250.000 dólares no son un sueño; mientras tanto, el cofundador de BitMEX ha echado un jarro de agua fría, asegurando que en un escenario extremo no sería imposible volver a los 70.000. Ahora mismo, alcistas y bajistas mantienen posturas opuestas y nadie convence a nadie.

En definitiva, estas predicciones hay que tomarlas con cautela. Todos sabemos lo impredecible que puede ser el mercado, y cuándo llegarán realmente las políticas favorables sigue siendo una incógnita. ¿Se alcanzarán los 175.000? Ya veremos, pero lo que está claro es que este viaje promete emociones fuertes y no va a decepcionar a nadie.