Los ejecutivos del sector de lujo están pintando un panorama diferente: los consumidores chinos están regresando con fuerza.

Mientras los titulares continúan impulsando la narrativa de desastre sobre la economía de China, las marcas de alta gama están viendo regresar el tráfico de clientes y el impulso de ventas. Fuentes de la industria informan que los compradores ya no solo están mirando, están abriendo sus billeteras nuevamente.

Esto importa más allá de las bolsas de diseñador. La confianza del consumidor es un indicador principal. Cuando la gente gasta en lujo, indica que se siente segura acerca de su futuro financiero. Para aquellos que observan tendencias macro, este rebote en el consumo podría insinuar un retorno del apetito por el riesgo más amplio en los mercados asiáticos.

Vale la pena estar pendiente de si este renacimiento de las compras se traduce en otras clases de activos.