Recientemente, al monitorear el mercado, he descubierto algo bastante preocupante: la ventana de tiempo para que DOGE pueda subir esta vez probablemente solo quede en unas pocas semanas.

En pocas palabras: si en noviembre no logra despegar, esta tendencia alcista prácticamente habrá terminado. Entonces, en lugar de discutir hasta dónde puede llegar el mercado en un ciclo alcista, estaremos hablando de cuánto podría caer en 2026.

Observando la línea semanal de BTC, es como si estuviéramos viendo la señal de un árbitro: ¿podrá este fin de semana volver a situarse por encima de los 103k-104k dólares? Si logra mantenerse estable, DOGE todavía tiene posibilidades. Pero si la semana cierra por debajo de 102k o incluso rompe los 100 mil dólares, podría confirmarse por primera vez que estamos entrando en un mercado bajista.

En cuanto a las altcoins, la situación es aún más pesimista. Eliminando las stablecoins, la dominancia de las principales diez criptomonedas que subieron en 2021 ya ha sido completamente recuperada. Cuando los precios alcanzan la banda superior del canal de varios años — aunque esto no significa que hayamos llegado a un techo, al menos indica que este ciclo de subida está bastante maduro y podría revertirse en cualquier momento.

Las monedas de alto beta como DOGE tienen una ventana de tiempo muy limitada. Mientras la línea semanal de BTC no cruce por debajo de las medias móviles, ese impulso de rebote se reducirá rápidamente.

Desde el punto de vista técnico, hay cierta contradicción: en el gráfico mensual, el MACD aún no ha cruzado a la baja, por lo que teóricamente todavía puede tener algunos movimientos alcistas. Pero la dinámica del mercado parece extremadamente pesimista, como si estuviera diciendo "ya basta". El estado del indicador de tendencia súper, se asemeja a marzo de este año — cuando cayó brevemente por debajo sin confirmarlo, a diferencia de la señal clara de venta en 2021.

El calendario realmente está apretado. En 81 días será enero, y con la situación actual, es muy difícil revertirla. Si en noviembre el precio no logra subir, la ventana de subida de DOGE podría cerrarse definitivamente.