A mediados de octubre, un artículo del profesor Campbell de la Universidad de Duke en Estados Unidos sacudió la Comunidad de cadena: en pocas palabras, con más de 6000 millones de dólares y suficiente tiempo, hay países que pueden desconectar la red Bitcoin.
¿Suena a alarmismo? Pero, pensándolo bien, es realmente preocupante.
El problema radica en el nuevo conjunto de políticas de Trump
Las políticas promovidas por Trump han vinculado directamente los activos criptográficos con la deuda estadounidense, lo que suena a control de riesgos, pero en realidad ha atado los dos mercados con una sola cuerda. Antes cada uno jugaba por su cuenta, ahora se ha convertido en una comunidad de intereses compartidos—esto es una espada de doble filo.
La verdad sobre las monedas estables
Los stablecoins son estables no solo porque están anclados al dólar, sino también porque detrás de ellos hay decenas de miles de millones de bonos del tesoro a corto plazo de EE. UU. Este mecanismo parece sólido, pero en realidad oculta riesgos: tan pronto como los stablecoins son golpeados, los bonos del tesoro también tienen que ser vendidos.
¿Realmente puede llevarse a cabo un ataque del 51%?
La comunidad técnica siempre ha creído que el costo de esto es demasiado alto y la dificultad demasiado grande, incluso si es atacado, se puede resolver con un hard fork en unos pocos días. Pero Campbell señaló la verdadera vulnerabilidad: todo esto se basa en la comunicación global fluida y el rápido consenso alcanzado.
Si la situación internacional empeora y la información no fluye entre las principales comunidades, ningún equipo de emergencia podrá manejarlo.
¿Quién tiene la capacidad de hacer esto?
Este no es un juego que pueda jugar un hacker común. Solo hay países que, con este poder y motivación, han sido llevados a un callejón sin salida en la confrontación geopolítica.
Tomando a Rusia como ejemplo: costos de energía bajos, abundancia de minerales, en estos años se ha continuado la inversión en minas, la base de poder de cálculo no es pequeña. Si se ven obligados a no tener otra opción, el Bitcoin podría convertirse en un “arma no convencional” en su guerra financiera.
Una vez que el ataque tenga éxito:
El precio de Bitcoin se desplomó en línea recta
La confianza del mercado se derrumbó instantáneamente
El pánico se ha extendido a las monedas estables
La deuda estadounidense fue vendida a gran escala
Todo el mercado de bonos de EE. UU. y el mercado de criptomonedas se sumieron en la turbulencia.
La reacción en cadena no es solo un problema de activos digitales.
Conclusión
Trump ha vinculado un activo que es intrínsecamente sin fronteras y descentralizado con el crédito soberano de Estados Unidos, y ahora parece que los inconvenientes superan los beneficios. Cuanto más tensa se vuelve la situación mundial, más se evidencia la fragilidad de este sistema.
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¿El Bitcoin está siendo estrangulado? El artículo del profesor Duke toca un punto doloroso.
A mediados de octubre, un artículo del profesor Campbell de la Universidad de Duke en Estados Unidos sacudió la Comunidad de cadena: en pocas palabras, con más de 6000 millones de dólares y suficiente tiempo, hay países que pueden desconectar la red Bitcoin.
¿Suena a alarmismo? Pero, pensándolo bien, es realmente preocupante.
El problema radica en el nuevo conjunto de políticas de Trump
Las políticas promovidas por Trump han vinculado directamente los activos criptográficos con la deuda estadounidense, lo que suena a control de riesgos, pero en realidad ha atado los dos mercados con una sola cuerda. Antes cada uno jugaba por su cuenta, ahora se ha convertido en una comunidad de intereses compartidos—esto es una espada de doble filo.
La verdad sobre las monedas estables
Los stablecoins son estables no solo porque están anclados al dólar, sino también porque detrás de ellos hay decenas de miles de millones de bonos del tesoro a corto plazo de EE. UU. Este mecanismo parece sólido, pero en realidad oculta riesgos: tan pronto como los stablecoins son golpeados, los bonos del tesoro también tienen que ser vendidos.
¿Realmente puede llevarse a cabo un ataque del 51%?
La comunidad técnica siempre ha creído que el costo de esto es demasiado alto y la dificultad demasiado grande, incluso si es atacado, se puede resolver con un hard fork en unos pocos días. Pero Campbell señaló la verdadera vulnerabilidad: todo esto se basa en la comunicación global fluida y el rápido consenso alcanzado.
Si la situación internacional empeora y la información no fluye entre las principales comunidades, ningún equipo de emergencia podrá manejarlo.
¿Quién tiene la capacidad de hacer esto?
Este no es un juego que pueda jugar un hacker común. Solo hay países que, con este poder y motivación, han sido llevados a un callejón sin salida en la confrontación geopolítica.
Tomando a Rusia como ejemplo: costos de energía bajos, abundancia de minerales, en estos años se ha continuado la inversión en minas, la base de poder de cálculo no es pequeña. Si se ven obligados a no tener otra opción, el Bitcoin podría convertirse en un “arma no convencional” en su guerra financiera.
Una vez que el ataque tenga éxito:
La reacción en cadena no es solo un problema de activos digitales.
Conclusión
Trump ha vinculado un activo que es intrínsecamente sin fronteras y descentralizado con el crédito soberano de Estados Unidos, y ahora parece que los inconvenientes superan los beneficios. Cuanto más tensa se vuelve la situación mundial, más se evidencia la fragilidad de este sistema.